Estas fotos tomadas en la playa de Muyne (un pueblo playero a 200 kilómetros de Ciudad Ho Chi Minh) hablan por sí solas. Los niños saludan con tal efusión que me es imposible no contagiarme de la alegría y embarcarme en reflexiones filosóficas sobre la inocencia, la infancia inconformista y caprichosa de nuestra sociedad aburguesada, el efecto balsámico de la risa infantil, la felicidad de las pequeñas cosas y este tipo de lugares comunes -que no por comunes dejan de ser ciertos- hasta que me saca de mi ensoñación uno de esos locos bajitos que se planta delante de mí con una mano extendida y repite, en un tono guasón y sin dejar de partirse la caja, lo segundo que aprenden a decir los vietnamitas: "one dollar, one dollar".
martes, 16 de diciembre de 2008
Todos dicen "hello"
Estas fotos tomadas en la playa de Muyne (un pueblo playero a 200 kilómetros de Ciudad Ho Chi Minh) hablan por sí solas. Los niños saludan con tal efusión que me es imposible no contagiarme de la alegría y embarcarme en reflexiones filosóficas sobre la inocencia, la infancia inconformista y caprichosa de nuestra sociedad aburguesada, el efecto balsámico de la risa infantil, la felicidad de las pequeñas cosas y este tipo de lugares comunes -que no por comunes dejan de ser ciertos- hasta que me saca de mi ensoñación uno de esos locos bajitos que se planta delante de mí con una mano extendida y repite, en un tono guasón y sin dejar de partirse la caja, lo segundo que aprenden a decir los vietnamitas: "one dollar, one dollar".
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2 comentarios:
Una sensación agridulce... La misma que en otros tantos países del globo...
¡Un abrazo, Eric!
Muy emotivas tus reflexiones. Si quieres tener la visión opuesta de la infancia, te recomiendo Ciudad de Dios, que da una visión tremenda de la infancia en las favelas Brasileñas.
De cierto modo la foto del niño sonriente me ha hecho sonreir. Me recuerda a la cara que pone Calvi cuando está contento por algo y añade un siiiiiii mientras asiente con la cabeza. Sin embargo Calvi nunca pisó una playa hasta los 18 años y creció rodeado de todos los caprichos de la sociedad cyber-aburguesada que mencionas.
Aunque como Calvi ha ido mucho a McDonalds hasta que le detectaron su alergía a la lechuga y al tomate, me pregunto si Calvi no procede en realidad de una sociedad "hamburguesada".
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