La mayor peculiaridad de las navidades filipinas es la fiebre pirotécnica del año nuevo. Es algo que ocurre en muchos países, pero dudo que con semejante magnitud.
Por ejemplo, dudo que en mucho sitios se tuvieran que desviar aviones y cancelar vuelos el 1 de enero por la niebla que formaron millones de minúsculos deshechos flotantes de la orgía de petardazos de la noche anterior. Dicen quienes estuvieron aquí que era imposible ver a más de un metro de distancia. La proporción de partículas del aire se disparó a 950 microgramos por metro cúbico, más de diez veces por encima del límite 90 que marca la ONU para el aire limpio y muy por encima de los 115 (ni tan mal) de media en los últimos meses. Los que lo celebraron en la ciudad (tuve la suerte de estar fuera) dicen que por la mañana no se veía nada a más de un metro de distancia.
Cada año hay un producto estrella, que generalmente está prohibido y se vende en cualquier esquina. El de este año era "Good bye, Philippines", no sé muy bien lo que hacía porque estaba resguardado, uno nunca sabe por dónde puede venir un tiro suelto (otra de las tradiciones es disparar balazos al aire). Aunque según dónde ni siquiera en casa pueda uno refugiarse, algunos tienen la costumbre de tirar los fuegos artificiales dentro para ahuyentar a los malos espíritus.
Por ejemplo, dudo que en mucho sitios se tuvieran que desviar aviones y cancelar vuelos el 1 de enero por la niebla que formaron millones de minúsculos deshechos flotantes de la orgía de petardazos de la noche anterior. Dicen quienes estuvieron aquí que era imposible ver a más de un metro de distancia. La proporción de partículas del aire se disparó a 950 microgramos por metro cúbico, más de diez veces por encima del límite 90 que marca la ONU para el aire limpio y muy por encima de los 115 (ni tan mal) de media en los últimos meses. Los que lo celebraron en la ciudad (tuve la suerte de estar fuera) dicen que por la mañana no se veía nada a más de un metro de distancia.
Cada año hay un producto estrella, que generalmente está prohibido y se vende en cualquier esquina. El de este año era "Good bye, Philippines", no sé muy bien lo que hacía porque estaba resguardado, uno nunca sabe por dónde puede venir un tiro suelto (otra de las tradiciones es disparar balazos al aire). Aunque según dónde ni siquiera en casa pueda uno refugiarse, algunos tienen la costumbre de tirar los fuegos artificiales dentro para ahuyentar a los malos espíritus.
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