miércoles, 23 de septiembre de 2009

Mi viaje a tierras del vietking

Hoy tenemos una firma invitada. El amigo Pablo, lector y comentarista asiduo de este blog, pasó diez días en Vietnam a principios de mes. Él, que lo vio todo con los ojos despiertos del recién llegado y no con los míos, que ya no se sorprenden como antes, nos cuenta la impresión que le dejó el país de norte a sur. Y aportará mucha más información práctica de la que yo he dejado en todos estos meses. Os dejo el texto que me ha enviado.


Muy buenas a todos los fans y lectores asiduos de este blog. Me gustaría compartir con vosotros mi viaje a ese lugar tan extraño y misterioso que, post tras post, nuestro querido Vietking se empeña en mostrarnos. Poder hacerlo, además, desde esta página es un privilegio y un auténtico gustazo.
Aterrizamos en HANOI, capital del país situada al norte (cerca de la frontera con China), el 28 de agosto (viernes).
La ciudad es bastante caótica. Motos, coches, vehículos varios que no había visto nunca antes en mi vida, y un hormiguero de gente de todo pelaje mezclándose en las carreteras (ya que las aceras están invadidas por puestos de venta de cualquier cosa: fruta, bolsos, camisas Lacoste de imitación, etc.).
Además, la ciudad tiene un tufillo comunista bastante marcado: edificios muy cutrillos de estilo soviético, muy pocos rascacielos o edificios modernos (y los pocos que hay tienen un aspecto setentero yeyé), fotos del lider Ho Chi Minh por doquier... Sin embargo, también conserva mejor que cualquier otra los edificios antiguos de la época colonial, situados en el barrio francés (donde están la mayoría de embajadas y hoteles de lujo), lo que hace que el contraste entre barrios sea bastante marcado.
Pasamos ese fin de semana en un barco en la BAHIA DE HALONG, no muy lejos de Hanoi. Ahí, de la mano de nuestro guía Hoan (léase “Juan”), descubrimos varias islas misteriosas, cuevas con estalactitas y estalagmitas alambicadas, hicimos kayak, nos bañamos en la bahía y Eric y yo marcamos un nuevo hito para los “Legendaries” cantando el "It's not unusual" de Tom Jones en el karaoke.
Después de eso nos trasladamos a HOIAN (el martes), la que dicen que el la ciudad mas bonita de Vietnam. Está en el centro del país (que mide unos 2000 km de largo).
En Hoian se conservan antiguas casas de mercaderes, pagodas y templos, casas comunitarias donde se reunían expatriados de una misma región (de Cantón, de Japón, etc.), y un puente cubierto japonés muy chulo. Como es una ciudad pequeña la vimos en un día, reservando la mañana del día siguiente para bucear (Eric) y hacer snorkeling (Ana y yo). El día salió jodido, la mar estaba picada, y Eric y Ana se pasaron un buen rato vomitando por encima de la cubierta... Una auténtica putada. Eso no impidió a Eric bucear, aunque Ana a penas podía moverse de una esquinita del barco en la que se había cobijado... En fin, que no os olvidéis nunca de las pastillas para el mareo cuando vayáis en barco. Por la tarde íbamos a ir a Hue, ciudad imperial y antigua capital de Vietnam, pero visto el panorama de la mañana decidimos descansar por la tarde y salir al día siguiente.
En Hoi an descubrimos unos restaurantes muy recomendables, destacando “Les Amis”, dedicado a Georges Brassens, con sus canciones repitiéndose una y otra vez. Eric y yo, como buenos freakies, coincidimos en que el restaurante se tenía que haber llamado “Les Copains”. Kim, el chef del garito, un tío socarrón y con bastante morro (sospechamos que no le gustaba especialmente Brassens y que solo lo ponía como reclamo publicitario para turistas franceses) nos sirvió una comida pantagruélica y muy buena. Además, nos salió la vena irunesa cuando creímos oír una canción de Luis Mariano.
Nuestro hotel de Hoian tenia piscina por lo que Eric y yo aprovechábamos los baños para conspirar y también para planificar un viaje para el año que viene por Filipinas (y quizás también Bali).
HUE. Una ciudad sin más pero con una ciudadela y una ciudad prohibida al mas puro estilo "El Último Emperador" del Bertolucci. Si no fuera por lo deteriorada que está por los bombardeos de las múltiples guerras, uno creería viajar en el tiempo.
Los últimos días los pasamos en SAIGÓN (también llamada oficialmente Ho Chi Minh). Está al sur del país y aunque no es la capital del país tiene 9 millones de habitantes (casi 3 veces más que Hanoi). La ciudad, contrariamente a lo que pensaba, es muy distinta de Hanoi. Mucho más occidentalizada, con avenidas amplias, bastante rascacielos, tiendas de moda, sin dejar de ser muy caótica, con el mismo trafico de locura y los vendedores por todas partes.
Ahí visitamos lo típico: el palacio de la reunificación (también enmoquetado y de ambiente yeyé), el museo de la memoria de la guerra (con fotos bastante impactantes de los estragos del Agente Naranja), Cholón (barrio chino) mas parecido al Hanoi de los 36 gremios, el centro con su ayuntamiento, su opera y demás, y los túneles de Cu Chi (aunque algunos también los llaman Cuchil) donde se refugiaba el Vietkong (no para defenderse -creo yo- como nos comentaban sino para atacar al Vietnam del sur, pero eso es otra historia).
Seguimos alimentándonos bien en sitios como el restaurante de la sorda o una barbacoa en una azotea. Apostamos -y perdimos- en las carreras de caballos; tuvimos en coctail en el restaurante español de Saigón: el Pacharan, con su posterior copa en el Apo, un garito con buena música y lleno de prostitutas; nos dimos los típicos masajes vietnamitas (alguno de ellos incluso pudo haber derivado en algo más) ..... Vamos que muchas cosas en muy poco tiempo
Pudimos conocer a mucha gente y nos quedamos con las ganas de ver, aunque su espíritu pululaba en el ambiente, a Cimbeles (cuyo blog ha desaparecido de la red misteriosamente, y que desde aquí hago un llamamiento para su inmediata puesta en libertad y, a ser posible, actualización).
Y eso es (casi) todo.
Os animo a todos a descubrir este gran lugar. Con las guías y pistas del Vietking os será todo mucho más fácil.

Hasta siempre.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que viaje tan completo, Eric! hicisteis un montón de cosas! mmm empiezo a tener curiosidad por conocer Vietnam! Y eso que hasta ahora no me llamaba mucho....
bettyboop